Fender Stratocaster
La Stratocaster es una guitarra de cuerpo macizo, obtenido a
partir de una sola pieza de madera, aunque en la actualidad la mayoría
se fabrica utilizando varias partes encoladas. El mástil va unido a él
mediante atornillado, salvo en algunos modelos Custom en que se recurre al encolado o al mástil de la misma pieza que el cuerpo Neck-through.
Añade también una pastilla más en su construcción. El selector de
pastillas de los modelos actuales cuenta, por lo general, con 5
posiciones diferenciadas, dos de las cuales activan a la vez dos
pastillas de la guitarra, conectándolas en paralelo, aunque en los
primeros modelos sólo disponía de 3 posiciones, una para cada pastilla.
Esto fue así hasta que algunos músicos encontraron la posibilidad de
disponer de dos nuevos sonidos "desfasados", situando el selector en las
posiciones intermedias. Estas nuevas posibilidades de sonido junto con
un diseño futurista para la época supusieron quizá el mayor reclamo de
la Strat frente a la Telecaster. Por su parte, las dos posiciones
intermedias (conexión en paralelo) le otorgan al sonido un cariz mucho
más líquido y profundo, de menor percusividad.
El mayor de los atractivos de esta guitarra radica en su sonido. En
las tres posiciones extremas del selector en la configuración estándar
se activan una a una las pastillas (de bobinado simple), que dotan al
instrumento con una gama de sonidos extensa y fructífera. Profundamente
sensible al ataque de la púa, se considera el timbre de la Strat uno de
los más característicos de la historia de la guitarra moderna.
Por eso la Stratocaster se considera una guitarra adecuada para
multitud de estilos musicales, prácticamente camaleónica. Tiene
sentimiento para el blues, "groove" para el funk, "punch" para el rock, textura para el jazz y agresividad para el heavy metal y el punk rock.
Su clásico rival en cuanto a ventas es la Gibson Les Paul, que tiene pastillas dobles (tambien llamadas humbuckers).
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